El título de este libro puede ser entendido de dos modos: como un
concepto (aquello que está más allá del malestar en la cultura) y como
un intento de ir más allá del texto de Sigmund Freud de 1930. Los
totalitarismos, las desestructuraciones sociales y el modo de ser
predominante de las sociedades actuales producen efectos en la psique
humana diferenciados de aquel malestar. Las sociedades de consumo,
dominadas por la aceleración de la temporalidad y el dominio de lo
tecnocomunicacional y –sobre todo– por el ansia del “siempre más”, no
hacen más que producir un sentido precario para que la psique pueda
retomarlo y crear así el propio, dificultando el surgimiento de un
adecuado entramado representacional y afectivo que ligue lo pulsional,
conduciendo muchas veces a padecimientos “de época”. Diversos personajes
y obras de la literatura y el cine –Hannibal Lecter, Lisbeth Salander,
Scheherezade, Perdidos en Tokio, 1984, etc.– van abriendo senderos en un
recorrido laberíntico, en el que las ideas del autor se encuentran,
entre otras, con las de Cornelius Castoriadis, Piera Aulagnier, André
Green, Sigmund Freud, Fernando Ulloa, José Bleger, Franco Berardi, Paul
Virilio y Karl Marx.